Los dolores de cabeza son un motivo frecuente de consulta médica. Aunque son una causa frecuente de sufrimiento, no todos los dolores de cabeza son iguales. Una migraña, por ejemplo, es un dolor de cabeza que parece producirse sin motivo alguno. Una migraña es un patrón de dolor de cabeza recurrente que va acompañado de náuseas, normalmente al menos parte del tiempo.
Síntomas
Puede experimentar náuseas, vómitos o la sensación de que la luz o el sonido le molestan en los ojos (fotofobia), o ambas cosas. Algunas personas son más propensas a las migrañas que otras. Otras sufren cefaleas tensionales y sinusales. Una vez que aparecen las cefaleas, el dolor y la agonía son constantes.
Los síntomas de las cefaleas son los que determinan el diagnóstico. El diagnóstico no puede hacerse mediante ningún procedimiento. Es posible que pueda identificar la causa de sus dolores de cabeza llevando un registro. Las personas que sufren dolores de cabeza pueden tener una anomalía hereditaria en la regulación de los vasos sanguíneos.
Disparadores
Los desencadenantes pueden clasificarse en varias categorías, entre las que se incluyen los desencadenantes emocionales y el estrés, así como los desencadenantes químicos, alimentarios y ambientales. Aunque se sabe que las cefaleas pueden ser hereditarias, no es necesario que los niños propensos a padecerlas las tengan. Las cefaleas tensionales pueden deberse a un sueño insuficiente, ansiedad, preocupaciones y otros problemas.
El estrés y las alergias también pueden desencadenar dolores de cabeza. Muchos afectados tienen antecedentes de cefaleas. Sin embargo, se desconoce si esta afección es hereditaria. Algunos dolores de cabeza, como la migraña, también pueden desencadenarse por el estrés, el insomnio, el exceso de sueño o el hambre. Puede haber unos cuantos desencadenantes que desencadenen el ataque de cefalea a la vez, pero estos desencadenantes pueden cambiar con el tiempo. Para algunas personas, el queso (pizza) es un factor desencadenante, mientras que para otras empeora una afección ya existente. Aunque puede ser difícil evitarlos, algunas migrañas pueden desencadenarse por cambios ambientales. Algunas personas creen incluso que las migrañas pueden desencadenarse por el estrés.
Ayuda a base de hierbas
Las hierbas Ginkgo y Matricaria pueden ayudar a reducir la intensidad de la migraña. Si el dolor es intenso (como suele ocurrir en las migrañas), puede ser necesario recurrir a la medicación. Para encontrar alivio sin fármacos, es importante conocer las causas de los dolores de cabeza. Las migrañas pueden aliviarse evitando ciertos alimentos. Algunos afectados reaccionan a la sal, la lactosa y los helados, el tabaco, las píldoras anticonceptivas y la cafeína.
Averigua si tienes alergias. Los dolores de cabeza pueden estar causados por alergias. Casi todos los tratamientos para el dolor de cabeza están diseñados para reducir o eliminar el dolor. Las personas que sufren migrañas intensas o frecuentes no deben tomar medicamentos. También deben evitar los desencadenantes y hacer cambios en su estilo de vida. Algunas personas descubren que quedarse dormidas puede ayudar a eliminar las migrañas.
Terapia alternativa
Entre los tratamientos alternativos para el dolor de cabeza se encuentran la aromaterapia, la acupuntura y la biorretroalimentación, así como la homeopatía y los remedios herbales como la matricaria. El aceite de menta o los suplementos de 5-HTP pueden aliviar las cefaleas tensionales. Las personas con migrañas leves que no interfieren en sus actividades cotidianas suelen tomar analgésicos de venta libre. Hay muchos remedios naturales que pueden ayudar con los dolores de cabeza.
Sin embargo, primero hay que determinar qué tipo de dolor de cabeza se padece. El diagnóstico adecuado es crucial para el tratamiento de las cefaleas. Las migrañas son un tipo común de dolor de cabeza recurrente. Hay muchos factores que pueden provocar dolor de cabeza o migrañas. No hay que recurrir a los medicamentos para el dolor de cabeza con demasiada frecuencia. Son grandes amigos cuando se necesitan, pero son malos maestros. Se puede colocar un paño húmedo y frío en la sien o la frente (en el lado que más duela), o una bolsa de guisantes congelados envuelta en una toalla. Las compresas frías a veces ayudan a aliviar el dolor.
Conclusión:
Los investigadores creen que la cefalea tensional y la migraña están estrechamente relacionadas. Esto explica por qué tantas personas que padecen cefaleas pueden experimentar ambos tipos de dolores de cabeza. Las cefaleas tensionales suelen aparecer a mediodía o a última hora del día. Las cefaleas tensionales pueden ser graves o leves. Algunas personas afirman que las cefaleas tensionales pueden ser peores que una migraña.